jueves, 28 de abril de 2011

Los Tiempos están Cambiando

Yo no quería que se perdiera nada, por el contrario anhelaba que se ganase aun más. Consideraba que un conocimiento no quita otro, sino que suma y engrandece. Pero pensaba que el cambio estaba a las puertas, que llegaría pronto o tarde y que eso nadie lo podía prever pero que sería ya en ésta o en próximas generaciones, sin duda. Los tiempos estaban cambiando, y las sociedades futuras en buena medida se construirían en un nuevo mundo llamado Internet y las Redes Sociales. Aun tampoco imaginaba entonces que ese Internet terminaría siendo fragmentado en muchos, muchos “Internets” y eso en lugar de ayudar pondría mayores dificultades para su difusión. Estar en todas partes no parecía posible para quien no maneja grandes presupuestos e inversiones.

Idiomas Auxiliares

Y es por descontado que estaría satisfecho si el Nol obtuviera éxito, aun fuera relativo y se conociera internacionalmente y todos pudieran usarlo con frecuencia pero también era de la opinión a su vez, que ya fuera el Nol o cualquier otro Idioma que llegase a convertirse en un Idioma hegemónico mundial del Planeta sería una gran catástrofe para el lenguaje en general y también para la riqueza cultural humana, pues significaría toda vez que una única y poderosa voz se alzaría y se haría escuchar acallando la diversidad y diferencia del resto de las preciosas voces del mundo. Una auténtica tragedia. Así pues en ese sentido al inicio más que en un Idioma pensé en el Nol como una útil herramienta para la comunicación escrita. Sólo que para ello inventé un lenguaje y éste resultó ser además un Idioma, pero en aquellos instantes yo no era muy consciente de todo ello.   

Idiomas

En los días que construí el Nol hablaba 8 idiomas: Bien, es un modo de decirlo, un par podría casi asegurar que excelentemente pues me eran propios: el Español y el Catalán, también los conocía bien en sus distintas y diversas variables antiguas, especialmente a través de la literatura y la poesía, incluyendo por supuesto el Romance y el Provenzal entre otros, sólo que no tenía a nadie con quien expresarlos ni comunicarme. Otros tres sin dificultades: el Francés que aprendí en la escuela, el Inglés que lo inicié brevemente en Cambridge para no dejarlo ya nunca y el Italiano que cursé en la Escuela Oficial de Idiomas y también en el Instituto de Cultura Italiano y el cual pude practicar en mis viajes a Italia, a menudo a Módena y Bologna. Finalmente otros tres que conocía pero ni mucho menos dominaba por completo: Alemán, Ruso y Portugués. Posteriormente adquiriría livianos conocimientos de otros tantos. 

Sociedades y Culturas

Adoraba las Lenguas actuales y mi perplejidad era tanta o más que los grandes detractores a tanta modernidad como reacción a la pérdida del lenguaje tal y como se conocía hasta entonces. Idiomas que habían dado tanta belleza a textos y literatura de clásicos y contemporáneos que con tanta pasión y emoción leí en el pasado eran hoy poco menos que reconocibles en un mensaje de móvil. Pero a la vez sabía que estos hermosos idiomas eran el resultado histórico de la evolución de otros anteriores y eso siempre seguiría ocurriendo así en mayor o menor medida en el futuro. Sólo que ese mañana ya era hoy ¿Y quién si no ellos, los jóvenes de todo tiempo y lugar, quienes podrían protagonizar esos nuevos cambios en nuestras sociedades y culturas?  

Música

Pensé en la musicalidad del nuevo lenguaje Nol y garabateé entre texturas de imposibles estrofas y estribillos que sonaban con fuerza al ataque imaginario de compases de la voz en mi mente. Y comprendí que Nol tendría su propia cadencia rítmica y melódica y por tanto siquiera necesitaría de acentos gráficos para expresarlo. En mi opinión Nol fluiría con tanta naturalidad a través de la constitución de sus sílabas como si se tratara de acordes ascendentes y descendentes que darían armonía a palabras y se construirían oraciones igual que fraseos de bella expresión lírica. De este modo tan original pensé el Nol.

Dibujar un Idioma

Cuando dibujé el Nol lo hice en el mismo lugar donde se escriben los sueños: En el aire. En un espacio vacío y abierto. Alzando mi vista al cielo tracé las líneas maestras de un nuevo lenguaje social moderno. Y dije que el Nol tendría que ser algo más que palabras, pues para hablar con las personas quizá eso bastaría pero si verdaderamente queríamos comunicarnos “plus ultra” con todos y en todo el mundo, unas nuevas palabras sólo no serían suficientes. Dije que a través de los idiomas sólo se relacionaban los vivos y no es poco, pero el modo de contactar plenamente, incluso con los que ya no están para eso existía otro lenguaje aun mejor: La Música. Así que pensé que si realmente existía un idioma universal éste existiría ya y no sería otro que precisamente ese: el Musical. Si quería que el Nol fuera aproximadamente lo más trascendente posible tendría que basarlo de algún modo en ese ancestral lenguaje. Así, por un momento, imaginé palabras flotando en el viento. Palabras en el viento. Y en el aire vacuo construí frases proyectándolas en un pentagrama de fantasía con notas musicales para una bella melodía ficticia: DO, RE, MI, FA, SOL. Imaginé como sonarían los verbos en una sinfonía figurada y entonces los identifiqué a mi modo como las notas más graves de una escala musical, así pues para ellos escogí la nota Do. A mi gusto presumí que los Pronombres bien podrían sonar en Re ¿por qué no? Los Adjetivos en Mi. Y los Nombres y otros fluctuarían entre Fa (los femeninos) y Sol (los masculinos) Así es como sonaría el Lenguaje en Nol. Por esa razón misma los Verbos Nol tienen desinencia O (do), los Pronombres E (re), los Adjetivos I (mi), los Nombres femeninos A (fa) los Nombres masculinos Consonantes + U (sol) Acotando esas clases semánticas a dichas notas pensé construir el nuevo idioma moderno. Al resto los dejaría moverse caprichosamente a su libre albedrío en registros más amplios y sin ninguna restricción.  

Innovación

Probablemente todo lo que se relaciona en nuestros días con la popular Innovación y Tecnología parece ser ámbito abonado prácticamente a matemáticos, ingenieros, informáticos, etc. También es cierto quien quiera ver matemáticas y audaces algoritmos en el idioma Nol seguro podría hacerlo y explicarlo desde esa magnífica perspectiva sin duda también, pero no obstante yo partía de un punto de vista distinto, desde un lado distante, virgen y lejano. Yo era sencillamente un idealista, un romántico, un utópico si se quiere, un pensador tardío, y por qué no reconocerlo: Un Soñador. 

Aprender Idiomas

Cuando creé el Nol en Agosto de 2006 muchos jóvenes usaban de modo generalizado mensajes abreviados de móvil, especialmente a través de “sms” y también en los chats en Internet sólo que por aquel entonces eran textos espontáneos, lenguajes improvisados “ideo-fonemáticos” que bien pudiéndose interpretar sin excesiva dificultad a la vez eran ilegibles, y aun menos pronunciables. Con la llegada del Nol eso cambió. Ahora no sólo podían leerse sino que además podían pronunciarse perfectamente mediante el nuevo Alfabeto. Mostré fácil como leerlos y pronunciarlos a través de la primera Lengua Social (redes sociales) de la Historia: el Ideal Nol. En realidad sistematicé por tanto y mediante el Alfabeto Nol algo que anteriormente y de un modo caótico era una última tendencia en el lenguaje escrito de muchos jóvenes de la época. En realidad, traté de interpretar como una evolución del lenguaje y una oportunidad histórica aquello que los jóvenes con aquella actitud modal le decían al mundo: Que los lenguajes actuales se evidenciaban obsoletos en alguna de sus funciones. Eran lentos, muy cargados y poco eficaces, especialmente para el uso de las nuevas tecnologías. En la mayoría de los casos es obvio que esa reflexión siquiera estaba presente, empero sino era un modo sencillamente de pretender economizar dinero, sin embargo sólo muy relativamente, porque todos esos mensajes cortos de texto no estaban optimizados en tiempo ni en espacio. Pues entonces ¿de que servía ahorrarte una o dos letras en un nombre o en un adjetivo para luego terminar por escribir un artículo o un verbo que no eran necesarios? Eso sólo propiciaba que otros, especialmente puristas de la lengua, padres o docentes en general tuvieran por aquellos entonces un motivo más de preocupación: Un desafío al lenguaje sin precedentes protagonizado por una generación que se reafirmaba usando de seña de identidad una descastada gramática que deterioraba las ortografías y corrompía los idiomas contemporáneos que hasta entonces parecían enquistados en sus antiguas normativas y leyes. 

El Inicio del Principio

Cuando regresé a Barcelona presenté una primera gramática Nol. Fue entonces que mantuve un encuentro con un amigo, un empresario barcelonés de ideas emprendedoras, Jordi Palanca. Le mostré mi creación y Jordi quedó atónito y asombrado de mi trabajo. Recuerdo bien sus palabras: “Te felicito y me pongo a tu disposición en todo aquello que me sea posible. El Nol es realmente extraordinario, aun debemos de ser conscientes de que el camino no estará exento de dificultades. Nos hundimos en la mayor de las indiferencias o bien nos dan el premio Nobel.” – Ah! era un modo de decir que no había término medio, por supuesto – Luego dijo “Para empezar no podemos pensar en lo uno ni en lo otro, solo trabajar duro y con entusiasmo y esperar tener un golpe de suerte que nos lleve directo al éxito” Añadió. La lealtad que ambos nos profesábamos y confiados de tener en nuestras manos algo valioso, desde ese instante nos pusimos en marcha para dar a conocer al Mundo el Nol. Así el 9 de Enero de 2007 constituimos una sociedad para la difusión de la Lengua Nol a la que llamamos E-nstitut Ideal Nol.

Con Bloc y Lápiz

Antes de aquel día, doy mi palabra que jamás pensé conscientemente en nada parecido. Entonces corrí como un poseso hacia la universidad. Necesitaba llegar a la residencia cuanto antes para transcribirla a papel y antes de que la olvidara para siempre. Subí como una exhalación a mi habitación. Tomé un bloc y lápiz, y absolutamente arrebatado trabajé sin descanso hasta entrada la madrugada. Cuando pienso en ello la razón me reconforta laureándome con que todo fue fruto del intelecto, pero alguna vez me he llegado seriamente a cuestionar si la manzana (símbolo del conocimiento) y la llama de fuego (símbolo de la revelación) tuvieron algo que ver en todo ello. Es un misterio, aunque juro que de ese modo tan extraordinario ocurrió. Creé el Nol para que fuera una Lengua de encuentro entre jóvenes del Mundo y dar una respuesta evolutiva al lenguaje actual adecuado al uso de las nuevas tecnologías. 

La Manzana y el Fuego

Lo cuento de este modo: “Al despedirme de mis nuevos amigos fui consciente de que algo importante iba a ocurrir, pero no imaginaba cuanto. De camino a casa, de súbito cayó una manzana a mi paso. No hay nada sobrenatural en que una manzana caiga de un árbol, pero tuve un repentino flash y me pregunté como fue posible, si durante toda la vida habían caído manzanas ¿Por que razón fue Isaac Newton y no cualquier otro quien elaboró la Ley de la gravedad? Por favor, nadie interprete en estas palabras que me estoy comparando, tan sólo es que aquello sucedió de esa igual manzana necesaria. Me sentía aturdido y mi cabeza daba vueltas sin parar como en una tormenta desatada. Desconcertado tomé un camino distinto al habitual. Sin rumbo y sin saber a donde iba de pronto me encontré de pie frente a la antorcha de un monumento que nunca había visto antes, frente a ella me quedé absorto durante un buen rato que siquiera podría precisar, y entonces de pronto tuve otro nuevo flash e intuí de inmediato una fórmula que me permitiría crear un idioma moderno mediante un nuevo Alfabeto.

El Encuentro

En un encuentro que tuvo lugar una tarde de miércoles cerca de una estación de metro, yo estaba citado con una muchacha checa, otra rusa y un chico inglés de origen chino. Lo cuento así: “Yo sólo conocía a Hugh (el muchacho británico) nos conocíamos de la clase de ruso y cuando llegué allí me estaban esperando, yo me expresé en mi mejor inglés dando por supuesto que todos me comprendían, pero tras mi discurso ellos hicieron mutis mirándose atónitos mutuamente, únicamente me había comprendido Hugh. Todos estudiábamos Lenguas extranjeras: de hecho la chica checa hablaba ruso, la chica rusa hablaba chino, el chico inglés hablaba español y por supuesto yo también. Todos podíamos entendernos perfectamente entre nosotros usando otros idiomas pero en ningún caso a la vez, sorprendente. Así que me dije que era extraño, todos hablamos otros idiomas y aun renunciando a nuestros excelentes y preciosos idiomas no teníamos un idioma de encuentro entre nosotros” Así que ese mismo miércoles 30 de Agosto de 2006 y concretamente alrededor de las 20.00 p.m del miércoles e ininterrumpidamente hasta aproximadamente las 08.00 de la madrugada siguiente nació el  Nol. 

Lomonosov

En la ciudad de Moscú, concretamente en la habitación 324 de la residencia de estudiantes de la Universidad Estatal Lomonosov de Moscú creé una Lengua moderna del siglo XXI. Primero inventando un nuevo Alfabeto al que llamé Ideal Nol, luego fijando innovadoras reglas gramaticales y posteriormente desarrollando el Idioma.

Rusia

La historia es de sobras conocida pero ¿qué ocurrió exactamente el 30 de Agosto de 2006 en la ciudad rusa de Moscú para que un estudiante de ruso llamado Enric Cabrejas tras un encuentro con otros estudiantes de idiomas inventase el Nol? Era mi tercer viaje a Rusia, a la ciudad de Moscú de la cual dije estar profundamente enamorado, porque Moscú es a mis ojos “mujer”, me refería ciertamente a las cúpulas de las iglesias rusas que eran femeninas en su redondez y sólo pasear alrededor de ellas era para mí casi festejar alegre y eternamente a la madrecita Rusia. A mí me gustaba Moscú, me fascinaba aunque ya se sabe que de Moscú se dice que no es Rusia. Hay dos ciudades importantes fuera de Barcelona y que significan mucho para mí, una es la ciudad inglesa de Cambridge donde empecé a estudiar Inglés (aun por muy corto periodo de tiempo) y la otra como no la de Moscú. Naturalmente para cualquiera serían ciudades opuestas en todo sentido y lugar pero no para mí, pues emotividad y sentimiento probablemente era lo que las hizo iguales a mi parecer. Más allá de ser ciudades al norte de mi punto de gravedad también tenía un sentido secreto el descubrir cada uno de sus parques, ríos, lugares y gentes, pero quizá la razón definitiva es que en ellas encontré el estudio que durante años anhelé y que nunca antes pude tener.